Más que palabras

¡Jacinta, Jacinta, oye! Pero cuánto tiempo sin verte, ¿cómo estás mujer? Ay Aurora, qué alegría verte. Pues mira no estoy mal. Ya veo Jacinta, estás estupenda, como siempre, con esa cara de jovencilla que tienes. Venga ya Aurora, te he dicho mil veces que tienes que revisarte la vista. Hija, cómo eres, que no aguantas ni un cumplido. Anda Jacinta, vamos a darnos prisa con disimulo que viene por ahí Raimundo y me pongo nerviosa perdida, porque mira que habla raro este hombre, por dios, que no hay quien le entienda. ¡Jacinta, Jacinta, Aurora, eh! Mecachis nos ha pillado Aurora, ya tenemos la penitencia del día hecha. Jacinta qué de tiempo sin verte, ya me he enterado por ahí que te has aficionado a los viajes del incienso y estás que no paras. Hola Raimundo, pues sí, lo del imserso está muy bien, conoces gente y sitios y, total, yo ya lo tengo todo hecho así que me he dicho, pues hala, a ver mundo. ¿Y tú qué tal estás? Pues ahí voy tirando con mis achaques, que parece que me ha mirado un tuerto. Mira, ahora mismo vengo de las asistentas que me están averiguando el grado de minusvalencia, a ver si me dan la paga de la independencia, porque, tú ya sabes que tengo a mis cuatro hijos de vuelta en mi casa, mi Raimundo con su cristofenia que no hay quien le haga tomarse el tratamiento que le ha mandado el sicata, mi Loli con las uronas comidas de la droga, mi mujer con una represión grandísima de ver el panorama, yo con las verticales destrozadas de todos los años que me he pasado en el campo, mi Juan, que tiene dos hijos chicos a su cargo, denunciado por abstinencia escolar, se ve que cuando lleva a los chiquillos al colegio se para en la taberna y se le va la mañana entera. Y el único bueno que tengo, mi Antonio, que le ha salido a su madre en el carácter, ese por lo menos está trabajando de peón puvilente en las obras del Ayuntamiento. Y para colmo de males, con tanta gente en mi casa, tuve que hacerle una hipoteca a la vivienda, y ahora me entero que tiene subsuelo, así que me he tenido que buscar un abogado de protección oficial para pelearme con el banco. En fin, aparte de eso, estoy muy bien y, por cierto, que me voy que llego tarde a la partida de dominó. Me alegro mucho de verte Jacinta. Aurora, a ti no te digo nada porque te veo todos los días. Adiós Raimundo, que tengas suerte. Sí, no hay problema, en el dominó no hay quien me gane. Madre del amor hermoso, qué barbaridad. Tenías razón Aurora, no hay quien lo entienda, ¿dónde habrá aprendido este hombre a hablar? Aurora, qué te pasa, dí algo hija, que parece que te han congelado. Me he quedado plasmada, Jacinta.  Ay, Aurora, qué se te ha pegado.

Aurora se declara en rebeldía

Eh, Aurora, ¿dónde vas tan corriendo mujer? Ay, hola Jacinta, voy a la tienda de Mariano que tengo que hacer unas fotocopias y mira que hora es, está a punto de cerrar. ¿Fotocopias? ¿de patrones para algún vestido? No Jacinta, déjate de patrones y de vestidos que no está la cosa para eso. Voy a hacer fotocopias de un modelo que me han dejado para recoger firmas, porque estoy ya muy cansada de tanto abuso y he decidido pasar a la acción. Uy, Aurora, miedo me das; ¿qué estás tramando?. Luego te lo cuento que me cierra Mariano; esta tarde paso por tu casa a tomar un café.
Mariano, hazme quince fotocopias de este papel. ¿Esto qué es Aurora? Una hoja para recoger firmas, y en cuanto salga la primera copia me pones tu dni y tu firma. Si hombre, voy a firmar yo nada sin saber de qué va esto. Mira, Mariano, esto va de reivindicaciones, que ya va siendo hora que nos pongamos las pilas en este pueblo. Ah, muy bien ¿y qué vamos a pedir si se puede saber? Pues mira, para empezar que nos suban las pensiones, que nos bajen la luz, que reduzcan el IVA, que los corruptos vayan a la cárcel y devuelvan el dinero robado, que los políticos se reduzcan los sueldos y cobren por lo que realmente valen, que se regulen las comisiones y actividades bancarias, .... Para, para Aurora, ¿pero tú crees que vas a conseguir algo? ¿tú dónde piensas mandar esto? ¿tú no has visto que todo esto ya lo han pedido un montón de colectivos y aquí no pasa nada? Mira Mariano, a mi eso me da igual; yo no me voy a rendir ni tú me vas a quitar las ganas de pelear; lo tengo que intentar. Vale Aurora, ¿y no has pensado en un escrache? Eso qué es Mariano otro fraude nuevo. No mujer, eso es una nueva forma de protesta que hace la gente delante de la puerta de los políticos, o donde los pillen; un aquí te pillo, aquí te mato; eso está de última moda y les molesta un montón; con decirte que hasta los propios políticos se han apuntado a hacérselo unos a otros. Lo que te he dicho Mariano, un fraude nuevo; si lo hacen los políticos no me gusta; además que aquí no tenemos a quien hacérselo; ya ves, si a los del Ayuntamiento los conozco desde que eran chicos, me voy a poner yo ahora a decirles perros judíos a grito pelado en mitad de la plaza; y mañana estoy en una residencia; quita, quita, eso lo dejo para los de ciudad que tienen más espacio para salir corriendo y no se conocen entre ellos. Ea Aurora, tus fotocopias. Ea, Mariano, pon la firma. Yo no firmo el primero, cuando hayas recogido cuatro hojas de firmas te pasas por aquí y te echo un garabato. Adiós, cobarde, adiós. Oye Aurora, son 50 céntimos. ¿Qué dices Mariano, si esto no es para mí, cómo te lo voy a pagar? esto es para el bien común, es tu contribución a la lucha. Pero Aurora, si yo no quiero lucha, ni contribuir ni ná de ná, que me pagues los 50 céntimos y en paz. Mira, Mariano, me voy que tengo prisa, que tengo que recoger un montón de firmas; cuando te deba 4 euros vienes a mi casa y me haces un escrache y a lo mejor te pago. ¡Auroraaaaaaa!

Necesito unas vacaciones.

¡Aurora, espera! ay, hija, ¿dónde vas con tanta prisa? Pues mira Jacinta, voy a la agencia de viajes que me voy de crucero. No me digas Aurora, mira qué moderna te estás poniendo. No es por modernidad Jacinta, es por necesidad; que necesito unas vacaciones como el comer; te podías animar y venirte conmigo, que vienen también Carmen y Antonia, las del centro de día y tú sabes que con éstas la risa está asegurada. Anda mujer, no puedo ir a ningún sitio este verano. ¿Y eso? Eso que con el dichoso anuncio de Aquarius se han puesto de moda los pueblos y no ha tenido mi nieta más ocurrencia que invitar a todos sus amigos de la capital; imagínate, ¿qué se creerán que se van a encontrar aquí? Pues yo te lo digo Jacinta, todo lo que no tienen en la ciudad, que se van a convertir en la atracción del verano y en otro sitio no son nadie. Eso será Aurora, pero dime, el crucero ese que vas a hacer que es el de la oferta de Pullmantur. Que va, otro más barato que se llama Costa Cruzalosdedos. Pero Aurora, ese no es el del barco que naufragó hace poco. Sí Jacinta, pero no fué por culpa del barco. Sí, ya lo sé, fué por el capitán. Efectivamente y ya me he asegurado yo de que ese hombre no es el que va a conducir el barco, así que yo tranquila; de todas formas me da igual lo que pase, yo necesito irme a  algún sitio para espantar mis males. ¿Qué males Aurora? Pues mira Jacinta, acércate que no nos oiga nadie; en ocasiones veo muertos. ¿Eso qué es un acertijo Aurora? si eso es el título de una película. No, Jacinta, es una verdad, tengo unas pesadillas horrorosas; todas las noches se me aparece el generalísimo, asomado en un balcón, diciendo entre grandes carcajadas: "españoles, la libertad sin dinero es como un tío en Graná, ni tienes tío ni tienes ná" y entonces hace un gran corte de manga y dice "toma democracia". Ay Aurora qué horror, eso es por la crisis mujer, deberías dejar de ver y oír las noticias, te lo he dicho mil veces porque es que siempre acabas saliendo por los cerros de Úbeda. Ay, calla Jacinta, ahora que dices cerros, otra pesadilla que también tengo es ver a Curro Jiménez, con su caballo blanco y el trabuco, que se acerca a un banco y dice "arriba las manos, esto es un atraco, yo soy el que roba a los ricos para dárselo a los pobres", y a continuación coge una bolsa con dinero y sale corriendo diciendo "y el IVA lo va a pagar tu tía". Aurora tú estás muy mal o tienes mucha gana de guasa. Qué dices guasa, si he ido al médico a pedirle un coma inducido de ocho horas para poder dormir un día del tirón. ¿Ah sí? ¿y qué te ha dicho? Que con los recortes me lo dejaba en cuatro horas, y claro, eso ya lo duermo yo sola, así que me he buscado la alternativa del crucero a ver si me duermo o me ahogo por ahí. ¡Anda Aurora, bébete un Aquarius! Sí hombre, para que diga mi nieta que viene con sus amigos y me fastidie el verano.

La clave está en distraerte.

¿Qué tal Aurora, cómo estás? Bien Jacinta aquí preparándome para las hogueras de San Juan. ¿Y ese saco Aurora? Es para meter todo lo que me voy a llevar para quemar. Tú lo que estás es haciendo limpieza en tu casa me parece a mí, deshaciéndote de los trastos viejos ¿no? No Jacinta, eso será lo que parece, pero no; este año me lo he tomado muy en serio, además que para hacer limpieza en mi casa ya tengo a Mariano que me la está dejando como una patena; ¿no te has dado cuenta de que el dueño del "Compro oro" ha abierto dos locales más? Sí, es verdad, ¿pero eso qué tiene que ver contigo?. Muchísimo, llevo meses entrando en ese local y no es para saludar al dueño precisamente. Vaya Aurora, no sabía que estabas tan mal. No Jacinta, yo no estoy mal, yo estoy como siempre, como el anuncio de fanta "con poco me lo monto", pero mi hijo mayor está en el paro y su mujer también, y ¿quién crees tú que está pagando la hipoteca del adosado que se compraron hace diez años? Ay, no me digas Aurora, no tenía ni idea. Claro, tú que vas a saber, si siempre vienen en el cochazo ese que se compraron hace seis años. Qué pena Aurora, si es que está todo fatal. Y peor que se va a poner Jacinta porque sólo me queda la medalla de la comunión. Entonces ¿qué vas a meter en el saco?. Aire. ¿Aire? Sí, el de todos los suspiros que llevo soltando desde hace meses; ni siquiera sé si me cabrán todos aquí. Aurora, ahora en serio, ¿para qué crees que sirve eso?. Mujer, Jacinta, esto es como el fútbol, ¿nos quita los problemas?. No. Pues esto es igual, me entretengo un rato.

Los buenos sólo ganan en las películas.

¡Ay Jacinta!, hay que ver cómo está el país, estoy realmente asustada. Yo también Aurora, no me explico cómo hemos llegado a este punto. ¿Qué va a ser de nosotras Jacinta? mis hijos dicen que como somos pensionistas no tenemos problema ninguno. Pues no estoy yo tan segura Aurora; si la seguridad social está en las últimas, tú no ves que de ahí sale el paro, indemnizaciones por despidos que no pagan las empresas arruinadas, bajas laborales, ... ¿Todo eso? Sí, Aurora, todo eso; y lo peor es que, como cada vez hay menos afiliaciones a la seguridad social, pues está la hucha que hace eco. A ver que me entere, ¿me estás diciendo que peligran las pensiones? Exactamente. Ay Jacinta que me da algo; pero bueno, ¿entonces para qué hemos estado pagando un montón de años? Para ganarnos el título de cargas para el estado. Ah, ¿ahora somos cargas? ¿y mientras pagábamos que éramos? Gilipollas Aurora, gilipollas.

El precio de un discurso.

Buenos días Jacinta, y Feliz Navidad. Aurora es la quinta vez que me felicitas desde ayer por la tarde. Y las que te quedan, es que con tanta gente por felicitar se me olvida a quien se lo he dicho y a quien no. Sí, a mi también me pasaba hasta que decidí que sólo felicitaría a quien me felicitase a mí, y así sólo repito cuando alguien repite conmigo. Realmente Jacinta, eso creo que es mucho más lioso, vaya lío de felicitaciones y repeticiones hija. Pues a lo mejor tienes razón. Bueno, dime, qué te ha parecido el discurso del Rey. No lo he escuchado Aurora, me puse un cassette de villancicos que tengo desde que era chica, de esos clásicos de toda la vida y me pasé toda la tarde y toda la noche cantando, así estoy hoy que parece que tengo una pandereta en la cabeza. ¿Y tú lo has oído? Sí, lo he oído pero no lo he escuchado, así que no sé lo que ha dicho, de todas formas a mí es que me da igual porque tú me dirás para qué puñetas sirve ese discurso. Supongo que para nada, y también supongo que el mismo rey se hará esa pregunta. Yo creo que tan sólo sirve para recordarnos que están ahí, y justificar de alguna forma porqué están ahí. ¿Para hacer un discurso de navidad? pues vaya si nos sale caro el discurso. Bueno, pero da mucho juego Jacinta, la gente lleva hablando del discurso más de tres semanas, que qué dirá, que qué no dirá, que no se qué del yerno, las imitaciones de los humoristas, las reacciones a favor y en contra de la monarquía..., en fin, lo que te digo, que da mucho juego. Pues mira Aurora, yo prefiero una playstation. ¿Eso qué es? Pregúntale a tus nietos, ya verás. Pero mujer, Jacinta, que mis nietos son muy pequeños para saber de política.

Cierra los ojos.

Oye Jacinta, ¿cómo ves tú el futuro inmediato?  Pues negro azabache polarizado, como el rey. ¿Qué lo dices por el lío con Urdangarín? No, mujer, por las gafas de sol. Ah, bueno, entonces es una oscuridad temporal, porque algún día se quitará las gafas ¿no? No sé qué decirte Aurora, lo mismo se las deja puestas, que para lo que hay que ver. No creas Jacinta, sin gafas nuestro rey volverá a su mundo multicolor, que nada tiene que ver con el nuestro. Tienes razón Aurora, el nuestro va a ser en blanco y negro, con o sin gafas. Virgencita, virgencita...