Este espacio ha sido creado para desahogo de dos mentes críticas con los despropósitos que a diario tienen que soportar. Con nuestro humor ácido vamos a desintegrar aquello que nos molesta.

jueves, 21 de julio de 2011

Capullo de seda

Oye Aurora, fíjate que casualidad que hablábamos el otro día de los trajes de Camps, y el episodio tan surrealista de ayer, con esa dimisión tan "divertida" y esos sospechosos y estruendosos silencios de quien hace tiempo debía haber dicho algo y todavía no ha dicho ni mú. Vaya Jacinta, qué razón tienes, qué cosa más rara, rara, rara; a todo esto, me gustaría saber de qué serán los trajes, supuestamente regalados, porque vaya, a mí no me sobornan con una batita de marca ¿eh? a mí por lo menos me tienen que regalar un traje de lentejuelas de Carmen Sevilla o de Sara Montiel o una cosa así. Pero Aurora, ¿qué tienes tú que ofrecer?. Yo nada pero mira, en algo me parezco a Camps. ¿Sí? Sí, en que aunque la mona se vista de seda mona se queda. Escucha Aurora...... No, nada de eso, yo no escucho nada de nada, si quieres te oigo, pero no te escucho. ¿Qué dices Aurora? Que no te escucho, que me vayas a meter en algún lío que estoy muy mayor, con lo que hay por ahí con lo de las escuchas ilegales o como se diga eso. Qué jarta estoy Aurora, pues óyeme entonces, que digo yo que a lo mejor los trajes eran de Fallera mayor. Ah, claro, así ya me cuadra más el asunto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario